12 de octubre, miércoles. Existieron dos parajes con este nombre: el ocupado por la calle Negrillos, Bajondillo, Herradores y Callejuela frente al castillo donde se colocó la artillería para la toma en 1484. El otro se conoció con el nombre de Cerrillo de Poco Pan o de Poca Harina. Al final del siglo XX se conocía, únicamente, con el nombre de Cerrillo. Todo en diminutivo.
Se encontraba, entonces y ahora, en la prolongación de la calle Erillas en su confluencia con la calle del Viento. También se puede acceder por el Camino de los Reyes que viene desde la calle del Calvario. Al otro lado, se encuentra, el paraje de “El Chinar”.
La calle Erillas arranca en
Vera Cruz, con una sola acera, en su incio, por la parte derecha. Desde
las traseras de la iglesia de ese nombre, hasta
La calle se formó al amparo de las eras o lugar para trillar la mies. En aquel tiempo, ya reconocía el poco valor que debían tener los sembrados de cereales de la zona.
La calle del Viento (pocos nombres más sugestivos, ¿verdad?) entronca con la calle Juan Naranjo y Palomar. Curiosamente, la calle Juan Naranjo, algunas veces, aparece como ‘Los Naranjos’ en referencia al padre y al hijo. El vecino Juan Naranjo estuvo casado con María Núñez, aparece en el folio 63 del Libro 2º de Bautismos, año de 1551. Tuvieron un hijo, llamado también Juan Naranjo. De ahí que, en ocasiones, aparezca con el nombre del apellido en plural. Es de las pocas calles llanas del pueblo.
El Cerrillo es un lugar de gran belleza
paisajistica. Aprovecha la pendiente de la calle para tener una configuración
especial. La salva mediante la construcción de calzadas lo que le confiere un
originalidad que comparte con otras del pueblo: Chozuela, Churrete o Negrillos…
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