viernes, 8 de julio de 2016

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Va a ser que no

Va a ser que no. Alguien acuñó que el “fútbol es un deporte que juegan once contra once y siempre gana Alemania” Es vez, no. Un chaval ‘hecho’ en la Real Sociedad y al que ahora le recoge su fruto el At. de Madrid los ha mandado a casa. Se llama Griezmann dicen que tiene origen alsaciano y juega con los suyos: la selección francesa.

Va a ser que no. En los Estados Unidos de Norteamérica los avances para eliminar los prejuicios sociales han avanzado un montón. Tanto, tanto, que hasta su presidente es un hombre de color. O sea, negro. Algunos de ‘rostro pálido’ deben tener los cables cambiados y disparan al negro como antes disparaban al indio… Ese país tiene muchos problemas; ese no logran superarlo.

Va a ser que no. Nadie en el Partido Socialista se presta a ir a tomar café, o a atender a eso que llaman una situación inoportuna y ausentarse un rato del Salón de Plenos del Congreso el día que haya que investir al presidente, que por cierto no hace ademanes de irse ni nada que se le parezca para contentar a los que no se contentan con su presidencia..

Parece que va a ser que no. El destino juega unas malas pasadas a las que difícilmente se les puede poner algo de arreglo. A ustedes también les habrá llegado un gupsá donde lo explican. Es ateo y se llama Iglesias, anticapitalista y tiene por apellido Monedero o es antitaurino y firma como “Er-rejón”.

Un charnego hijo y nietos de andaluces - Granada y Jaén - lucha a brazo partido por la independencia de… Catalunya. Salió de una plataforma formada por castellanoparlantes que pugna por separarse de… España.  El hombre tiene un apellido que así a golpe, de pronto, chirría un poco: Rufián.


Va a ser que no. Los revantadores no se salen con la suya, y viene, aunque ya es mala sombra, que a la ciudad donde sobra sol  y faltan sombras  llega una ola de calor que no se quiere perder las visita del presidente Obama. Trae un séquito, el presidente, claro,  de más de cuatrocientas personas. Viene a Sevillla. Sevilla, Sevilla, Sevilla. Seguro que se llevan un recuerdo imborrable cuando se vuelvan a Washingthon, su pueblo… 

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