sábado, 12 de marzo de 2022

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Alcachofas

 

                               


12 de marzo, sábado. Su origen incierto, se remonta a la antigüedad. Los expertos afirman que es una mutación. El hombre consiguió lo que hoy consumimos. Los árabes la introdujeron en la Península Ibérica en el siglo XV, aunque no se descarta que fuese conocida por griegos y romanos.

Su nombre científico, Cynara scolymus y está emparentada con las tagarninas y con los cardos. Pide tierra franca y es amiga de la materia orgánica. Necesita una humedad continuada, pero no quiere encharcamientos que producen pudrición por hongos en su base.

Su cultivo, anual si se destina a consumo en fresco y bianual si la producción va para la conserva. En los anuales la plantación se levanta una vez recolectada. Según qué zonas se siembra en agosto o finales de verano (puede ser en estaquilla o en semillas) y comienza a dar su fruto en invierno, entre febrero y abril.

La alcachofa en conserva garantiza su presencia en el mercado en todas las épocas del año. Según el destino culinario pueden ser muy pequeñitas o en trozos previamente manipulados que le permiten aparecer con diferentes calibres. Se clasifican en ‘extras’ y ‘primera’ según el calibre a la hora de la recolección y va entre 60 y 90 mm y superiores a los 90 mm.

Los mercados la regulan y se pueden ofertar con tallo y hojas. El tallo, hasta los 18 cm de longitud, presenta una o dos hojas enteras. En algunos puntos de España se venden por docenas; en otros, al peso. Si se presenta sin tallo, éste no debe superar los 10 cm de longitud.

La preparación de esta verdura requiere mucho trabajo y experiencia. Deben eliminarse las hojas que cuanto más al exterior, son más duras, en cambio las interiores, al carecer de clorofila son más blancas y más tiernas.

Es muy beneficiosa para la salud. Tiene un alto contenido en magnesio, fósforo y calcio, además de un gran aporte en fibra. Entre sus elementos destaca la cinarina que le da un ligero sabor amargo que aumenta la secreción biliar y protege el hígado. Ayuda a la recuperación de enfermedades hepáticas.

En la naturaleza aparece de manera silvestre con muchas espinas y en algunos lugares la llaman alcauciles, nombre que también le aplican a las cultivadas. Son de gran calidad las producidas en la Ribera del Ebro…

No hay comentarios:

Publicar un comentario