sábado, 29 de diciembre de 2018

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Las nuestras: María Antonia Esquivel y Navarrete





María Antonia Esquivel y Narrete, de familia aristocrática, nació en Vitoria en 2 de febrero de  1778 donde murió en 1849 a los sesenta y un años. Sus padres,  Ignacio Vicente Esquivel y Peralta, marqués de Legarda y Manuela Navarrete y Lisón de Tejada.

Pasó su infancia en el palacio familiar, conocido como el palacio de los Legarda en la esquina de Santo Domingo, en la calle Zapatería. El 29 de diciembre se casó con el riojano liberal, natural de Ábalos,  Antonio Fernández de Navarrete y Ximenez de Tejada, héroe de la Guerra de la Independencia y diecinueve años mayor que ella. Del matrimonio nacieron dos hijos.  Un varón, Benito que llegó a ser deán y canónigo de la Seo de Zaragoza y una hija, Demetria casada con un primo carnal.

 Aunque su marido vivió casi siempre en la tierra riojana, ella optó por permanecer en Vitoria donde desarrolló una activa participación política dentro del extremismo del liberalismo desmarcándose de la postura más moderada de su familia.

Su marido perteneció a la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País (durante el franquismo tuvieron que cambiar la ‘b’ por un ‘v’ al considerarse como un marcado nacionalismo vasco). La sociedad tuvo como objetivos el desarrollo de actividad en cuatro sectores fundamentales para el desarrollo de la economía en su momento de fundación, en 1765: agricultura; ciencias y artes útiles; industria y comercio; y política y buenas letras. Fueron miembros descatadas figuras como Olavie, Meléndez Valdés o Samaniego.

Al concluir la Guerra de la Independencia, en 1814 e instaurado el absolutismo de Fernando VII fue encarcelada, conjuntamente, con otros vitorianos asiduos a la tertulia que celebraba en su casa de Vitoria,  bajo la acusación  de afrancesado y de haber colaborado con el gobierno francés de ocupación.

Su marido murió en 1830. Una vez viuda María Antonia continuó viviendo en Vitoria, y en su casa tenía lugar una animada tertulia a la que acudía la burguesía liberal de la ciudad.



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