miércoles, 4 de septiembre de 2019

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Otra vez un Guardia Civil fuera de servicio






España – parte de España – está conmovida por la muerte de Blanca. Todas las muertes, absolutamente, todas vienen siempre mal. Sea cómo y cuando sea. Mal, siempre la muerte viene mal.

Esta mujer tuvo un hálito de fama y popularidad. Consiguió éxitos. Luego se apagaron los focos; nadie o casi nadie se acordaba de ella.

Ha encontrado la muerte en la Sierra de Guadarrama, muy cerca de los límites provinciales – entre provincias y comunidades hay límites y no fronteras  como decía una indocumentada que facilitaba información este mediodía – de Madrid y Segovia.

Se llama el Pico de la Peñota. Ronda los dos mil metros de altitud. Zona peligrosa por posibles resbalones y por pendientes muy pronunciadas que, en ocasiones, propician caídas y, detrás, el accidente y la tragedia.

Están las buitreras abiertas. He tenido los santos… eso que ustedes están pensando, de no ver ni una sola, ni una sola tertulia,  repito de esos sabelotodo que están pontificando. Le digo que no los he visto, pero intuyo que es así. Si no lo es, ustedes disculpen la osadía.

Hay otra pléyade. Los que viven del presupuesto. Los que se han arrimado a Blanca para salir en la foto y chapar de lo que ella consiguió y ahora, lanzan mensajes doliéndose  - ¿de qué se duelen estas alimañas de coche oficial  y corbatas de seda?- de la desgracia,  de su muerte y de su irreparable pérdida. ¡Hipócritas! ¿Cuántos le ofrecieron algo para seguir viviendo con dignidad?

Mi amigo Pedro Rodado, valiente donde los haya, lanzó un mensaje y los puso – a unos y a otros en su sitio -. No tengas pena, Pedro como en tantas otras cosas, en esto, tampoco te escucharán… ¡Ya ves cuál fue el final de los profetas!

Nos dolemos estos días por aquí, por mi tierra de la muerte de Ana Elena. Le arrebataron la vida, hace unos años,  una víspera de Romería de la Virgen de Flores, tres sin alma. Su cuerpo apareció en un cañaveral. Lo encontró un Guardia Civil ‘fuera de servicio’. Entonces no sé si era Sargento o Brigada, da lo mismo…

Esta mañana ha sido otro Guardia Civil ‘fuera de servicio’ quien ha encontrado el cuerpo de Blanca. Bendito Cuerpo al que no agradeceremos nunca suficientemente cuanto hacen por esta sociedad cuando están de uniforme y cuando están…¡fuera de Servicio!




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