Era como pasada la mediación de la mañana. El sol ya estaba
alto; la brisa aún no se había levantado;
brillaban las gotas de rocío. Las banderas que escoltan el arco que
imita a algo antiguo en la Fuente de la Manía estaban quietas.
La circulación de vehículos ya no era tan intensa… Los coches
se ceden el paso en la rosa de los vientos que se forma en ese cruce de
caminos. La sierra del Valle, en la lejanía, muestra la caliza desnuda. Sube
una nube vaporosa desde los bajos de vega: es la evaporación
La chica viste de negro. No por nada especial: sabe que el
color le favorece. Enfila la Avenida
Pablo Ruiz Picasso. La chica hace unos años que entró en esa edad donde la
madurez es la que manda. Es invierno, la chica va abrigada.
Es coqueta, sensual, enigmática. Rompe la uniformidad y pone colorido con un pañuelo rojo al cuello.
Usa minifalda; botas de cuero a media caña, a juego. …Pudo haber sido la musa
de Claude Lelouch en “Un hombre y una
mujer” porque tiene el embrujo de Anouk Aimée; pudo ser la musa de Fellini
en “La dolce vita”; pudo…
Protegía los ojos de los rayos del sol con unas gafas de
cristales ahumados. Un abrigo largo ocultaba siluetas de un cuerpo bien
conformado. La chica es de estatura media. Todo es armonía.
La chica se corta el pelo a media cara. Anda con paso firme.
Lleva en su mano una bolsa. Ha estado de compras. La bolsa pende, por el peso,
de manera vertical y se acompasa con el andar garbeado y seguro de la chica. Cruzó
por uno de los pasos habilitados. Lo
hizo por el que permite salvar la carretera que va a Flores…
La chica forma parte de eso que llamamos vida. La vida de
cada mañana de un pueblo con nombre. La chica tiene, también, nombre y dos
apellidos. La chica pone hoy el acento sin que ella lo sepa - ¿o sí lo sabe? –
a unas líneas sueltas…
No hay comentarios:
Publicar un comentario