Arreciaba un aire racheado y revuelto. De banda a banda, en
el Parque de Málaga, se bamboleaban con el viento. Eran luminarias raras –con
la luz del día – pero de noche serán ascuas de luz. Dicen que ya viene. Preparan para hacerle sitio a la
Navidad.
Nostalgias, recuerdos, añoranzas, penas que se asoman y no
dejamos salir… Todo eso y más. Por mor de la crisis no van a gastar, lo que
otros, años en luces y en árboles exóticos que traen de otros montes y que
llenan de bombillas de colores y pascueros rojos y no sé cuántas cosas más.
De niños, montábamos el Nacimiento. La casa, por unos días
olía a romero, a tomillo, y aulagas en flor, y a ríos con papel de plata, que
no era de plata, y que ‘Juanico el Bonela’
nos guardaba cada vez que vendía una libra de chocolate. (Del bueno, que era el
que había entonces, del de ahora ni…).
Lavaba una lavandera día y noche -.con lo fría que está el
agua de los ríos en invierno- y por el puente de corcho pasaba un hombre con un
borriquillo cargado de leña, nadaban una pata seguida de sus patitos, trepaban
ovejas y cabras por la gandinga convertida en roquedos de ilusión.
No faltaba la piarita de cerdos -¡por Dios cerdos en el
mundo hebreo¡- ni pitas ni chumbas que todavía no habían venido de
América. Nosotros las arrancábamos en los pechos del Calvario,
en el Quebraero o en la herriza…Un hombre araba con una yunta.
Un castillo almenado, escoltado por dos soldados - lanza y escudo- vestidos de romanos
protegían al rey malo. El Rey bueno, estaba en el establo. El buey y la mula y
María y José y unos pastores, de rodillas; por las montañas bajaban unos Magos que venían de Oriente. No sabíamos dónde
estaba oriente pero sí que estaba muy lejos…
Un ángel con una banda y un mensaje. “Gloria a Dios en las
altura y, en la tierra, paz a los hombres de buena voluntad”. El Vaticano II
–el Concilio- cambió el texto y puso “a los hombres que ama el Señor”. El Señor
tiene que amar a todos los hombres; a algunos, más; lo necesitan más. Con la
que está cayendo… Pero, eso, dicen que ya viene.
Añoranzas, añoranzas...
ResponderEliminarHoy lo que impera es el árbol, papa Noel y otras cosillas traídas de allende.