miércoles, 20 de agosto de 2025

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. No están, pero están

 


             Fernando Diaz, Juan Márquez. En el centro Bartolomé Vázquez; al fondo, Pepe Rosas


20 de agosto, miércoles

 

 Dice la tradición oral que Ella llegó primero. Había comenzado el siglo XVI, 1502 ¿El lugar?  Reales Alcázares de Sevilla. La Reina, Isabel, - Isabel entregó a un grupo de hombres, una imagen de la Virgen. Algunos de Encinasola; otros, de otras tierras. Todavía no se llamaba aún España. El alcaide del castillo Diego de Vera, designado por Portocarrero.

La devoción, con anterioridad. Los pendones de Castilla entraron en la fortaleza en 1484. El 22 de junio, o al día siguiente. En un lugar apartado se celebró una misa. ¿Se entronizó alguna imagen? No lo sabemos. Arrancó la devoción a laVirgen de Flores…. La habían traído los hijos de aquella tierra en el confín del Reino de Sevilla.

Desde entonces, un camino largo; a veces, con dificultades; otras, con silencios.  Desde comienzos del siglo XX (el convento franciscano desamortizado en 1835) aparecen las aportaciones históricas de don Vicente Moreno y don Antonio Bootello. Se retoma el reencuentro.  A partir de la Guerra de África surge un rebrote de la devoción popular. Comienzan las romerías… Luego, otra vez,  la ola difuminada en alta mar, vuelve a la orilla...

En la foto, junto a Ella, cuatro personas entrañables, Fernando Díaz, Juan Márquez, Pepe Rosas   Bartolomé Vázquez... La foto puede ser de los años 50 del siglo XX. Una romería y la llevan o la bajan de la carreta. Por la posición de los que rodean aparece acercamiento.

Fernando Díaz, se dedicaba al transporte. Casi al final, extraía áridos, o sea, arena de la confluencia del arroyo Jévar con el río Guadalhorce. Unos ‘listos’ decidieron que aquello llegaba a su fin. Persona buena, servicial. Yo guardo un recuerdo muy grato. De niño, si me veía por la carretera de Los Llanos – iba o venía de casa de mis abuelos – me subía en el cajón del camión. El paisaje para mí – un niño observador - ya era paisaje de algo que se llamaba el mundo.

Juan Márquez – me lo dijo un día - era amigo de mi padre. Hombre afable, cazador de jaula, jefe de la Policía Local. Solo vestía de un uniforme en las solemnidades. Jubilado se marchó a donde el Atlántico acaricia con las olas sus playas. Su única hija vive allí…. Cuando regresaba al pueblo era muy grato nuestro reencuentro.

Recuerdo a Pepe Rosas con cariño. Tanto que aflora muchas veces. Lo poco que sé de nuestro folclore – fue el más grande que ha dado Álora – me lo enseñó él. Pasará mucho tiempo para que venga alguien y lo iguale…

Bartolomé Vázquez, “Bartolo, del de Adelina (una mujer marcada por el sufrimiento, el trabajo y por todas las durezas que se le pueden venir a una persona encima), tuvo una vida difícil. Nadie le regaló nada… A los demás de la foto, no los he reconocido. Ellos, no están, pero no se han ido.

 

 

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