27 de julio, jueves. Romance
de amor entre dos mundos. Alfonso VI rey de Castilla y León, en un lado; del
otro, la princesa Zaida; venía de la corte sevillana, casada con un hijo de
Al-Mutamid. Otra versión la sitúa como hija, habida con Itimad que el pueblo
conoció como Rumaikiyya.
Según qué camino los avatares
son unos u otros. Provenía de un ambiente
hedonista, palaciego, cultivada. Sabía de música, poesía y relaciones entre las
gentes. Dicen que era pulcra y bellísima.
Sevilla, la taifa luminosa,
sobresalía sobre todas las demás y agregaba que era la más grande y la más
bella de toda. De allí se irradiaba el poderío, en todos los campos, a todas
las otras taifas que habían surgido tras el derrumbe del Califato, en
territorio de al-Andalus.
Fue concubina de Alfonso VI, se
casó con él cuando mueren Inés de Aquitania de salud muy frágil, Constanza de
Borgoña y Berta, en 1099, cuando ya casi finalizaba el siglo XI y con quien
tuvo a Sancho Alfónsez, llamado a suceder a su padre de no haber muerto, casi
niño, con catorce años, en la batalla de Uclés. Alfonso se sumió en la tristeza,
la melancolía y la desesperanza, aunque algunas crónicas dicen que murió ‘de
unas fiebres’.
Zaida, belleza andalusí, nació
hacia el año 1063. El cronista Ibn Idari dice que casó Abu Nasr Al’Fath al
Ma’mun rey en la taifa de Córdoba e hijo de al-Mu’tamid (versión de nuera). La
sitúan también como sobrina del rey de Lérida y Denia…
Alfonso VI fue un rey vigoroso
y guerrero, una figura de gran importancia en el siglo XI. En 1091 llega Zaida, enviada por su padre con
la promesa de matrimonio, pide ayuda para luchar contra los Almorávides que lo
destronarían posteriormente y una dote impresionante.
En 14 de mayo de 1100 se casa
con Alfonso, convertida al cristianismo. Tomó por nombre Isabel, después ocupó
el trono, a su lado, como reina y emperatriz hasta 1107 en que muere con 42
años sin poder ver a su hijo reinando. En tres años mueren Zaida, Sancho y
Alfonso VI. Un mestizaje de la sangre de dos culturas hechas añicos por mor de
la guerra. Dicen que irradió belleza y admiración en aquella corte de la Edad
Media.
Bibliografía:
González Palencia, Ángel (1932) La España musulmana. Barcelona.
Martínez Díez, Gonzalo (2003). Alfonso VI: Señor del Cid, conquistador de
Toledo.
Sáiz Ordoño, Argimiro (2010). Zaida, ¿esposa o concubina. Cuenca:
Aldebarán Ediciones.
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