Petra es una
ciudad pequeña de la Pla de Mallorca, no
lejos de Manacor. Allí nació en noviembre de 1713. Sus padres Antonio Serra y
Margarita Ferrer. Le pusieron por nombre Miguel José.
Asistió a la
escuela de los franciscanos del convento de San Bernardino en su pueblo. La
inteligencia del niño lo llevó a otra que tenía la Orden en Palma. Profesó como
franciscano y tomó el nombre de Fray Junípero. Se doctoró en Filosofía
alimentado por la doctrina de Ramón Llull y Teología Escotista. Fue profesor en
la Universidad Luliana, embrión de la futura Universidad de las Islas Baleares.
Con treinta y
seis años emprendió la aventura de América. Pasó por Málaga y Cádiz donde la
burocracia lo retiene unos meses. Llega a Puerto Rico, y de allí, a Nueva
España y por Veracruz hacia Ciudad de México. Él, con otro expedicionario, hizo el viaje a pie, más de quinientos
kilómetros. Sufre una lesión en una pierna que le acompañará toda su vida. En
Sierra Gorda reemprende la labor iniciada y fracasada por otros hermanos de la Orden.
En 1776, Carlos
III expulsó a los jesuitas. Les encarga a los franciscanos la evangelización de
la Alta y Baja California. Fray Junípero es el lider de la nueva misión que
tienen como primer objetivo evangelizar a los nativos. Encuentran una sociedad
primitiva y de subsiencia a base de la caza y la recolección de productos de la
tierra.
Funda nueve
misiones: San Antonio de Padua, San Gabriel, San Luis Obispo de Tolosa, San
Juan Capistrano, San Francisco de Asis… En Loreto, la base de operaciones.
Construyen, en primer lugar una capilla, un pequeño fuerte para defensa en caso
de ataques, y cabañas para los indígenas a los que les invitan a quedarse. Alguna ciudades proclaman
con su nombre el origen de su fundación: Los Angeles, San Antonio, San
Francisco…
A los indígenas les
inculcan el sentido de propiedad de la tierra y su integración en la sociedad
española que le acarrea enfrentamientos con las autoridades. Les enseñan principios
de agricultura y ganadería, les dan semillas, les introducen en las artes de
albañilería, forja…, y les proporcionan ganado. A las mujeres las adiestran en
las labores de cocina, costura y confección de tejidos.
La Universidad
de Stanford se suma a denigrar su figura. Incluso, en la propia Palma
han vilipendiado su estatua. ¿Reescribir otra Historia?
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