jueves, 26 de enero de 2017

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Cabalística

Suma este año, 2017, diez. O sea, pinta a bueno. Hay otras coincidencias para que además de bueno, pase a mejor. El siete es un número repetido un montón de veces en mi vida. No es cuestión de  detalles. Nací un 27, - era enero, y mi madre me contaba que aquel año, 1947, hizo mucho frío -. Estamos, en 2017; cumplo 70 años…

Siete años duró mi formación en el Seminario de Málaga. Allí me enseñaron a traducir a Cesar, Tito Livio, Cicerón, Horacio, Virgilio… Bueno lo de traducir es un decir. Más correcto era eso de hacerlos gandinga. Allí, nació la amistad; aún, perdura.

Nunca me gustaron las Ciencias. Lo mío, las Humanidades.

-          Don Juan, si yo he hecho el problema.

-          Sí, tú lo has hecho, polvo.

Me aportaron ¡tanto!  Imposible cuantificarlo. No es lo más importante. Lo que realmente vale son los valores que me metieron dentro. Hacerlos públicos – humildad es reconocer lo que se tiene – suena a vanidad. No es mi intención. Mi amigo Barbeito, me provoca (por lo de la puntualidad), y va, y me dice si es  “el AVE de Álora”…

Treinta y siete (otro ‘siete’) años por la enseñanza. ¡Qué bonito aquel día en que Tere, me dijo: yo hice Historia porque tú me enganchaste en la manera que tenías de explicarla! ¡Qué bonito cuando le dicen a mi hija: Tú padre, me enseñó a deleitarme con la música clásica! ¡Qué bonito cuando hombres y mujeres, vienen y te dan un abrazo y te dicen… y a uno, que tiene su alma en su almario, se le humedecen los ojos.

Tres hijas, dos nietos y dos mujeres (aunque una físicamente, no está),  suman siete…Un puñado de libros; unas gavillas de artículos; el campo, Juan Ramón, San Juan de la Cruz, don Antonio,  y amigos… Son más de siete. (Ya ven, uno no es perfecto).


Hace, también, 67 – otra vez, el siete –  años que perdí a mi padre. No he dejado de recordarlo. No sé si lo que viene a mi mente es recuerdo, fantasía o realidad. Vive dentro del niño que se hizo grande y no lo olvidó y que hoy, que es un día especial, le da la tabarra a quienes tienen la amabilidad  y la generosidad de leerlo hablando de él mismo. Gracias, a Dios, que me ha dado tanto! (Ah, 397 palabras, ¡otro siete!)

La imagen puede contener: océano, cielo, nube, exterior, agua y naturaleza

4 comentarios:

  1. Como a ti amigo Pepe el número 7 me coincide en mi vida muchas veces, yo te admiro y te respeto y te quiero un poquito, te deseo que celebre muchos cumpleaños como este y verlo pasar siendo tu amigo. Que tengas un Feliz dia .Un fuerte abrazo. Leonardo

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    1. Muchas gracias, Leoanardo, sabes de sobra que nuestro afecto es mutuo.

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  2. Felicidades de todo corazón. Para nosotros eres más de lo que dices, te admiramos y te queremos.Un abrazo

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  3. Muchas felicidades, Pepe.
    Aprovecho para enumerar siete razones por la que tanta gente -o al menos yo- te seguimos:
    1.-Es como tomar un humeante café en el velador del casino de la vida. ¿Quizá siete minutos?
    2.-Una ventana por la que entra el aire fresco "del lugar".
    3.-Por la forma tan precisa y ajustada que tienes de enlazar las palabras. ¡Qué difícil!.
    4.-Por la selección de los temas. Consigues sorprendernos cada día, con lo difícil que es rebuscar, escoger y, luego, desarrollarlo.
    5.-Por la óptica, la opinión ponderada y razonable.
    6.-Por la cultura que se desliza entre las líneas que escribes.
    7.-Y por la fotografía con que ilustras cada hoja.
    Por todas estas razones y alguna más que me salto para no llegar al ocho, GRACIAS, PEPE.

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