Acuñó el Maestro Alcántara: “Madrid se desayunaba café con
leche y César González Ruano”… Uno, desde hace un tiempo, ha cambiado parte de
ese desayuno anunciado por el Maestro. Y así: Artículo de Barbeito, pincelada
histórica de José María Hidalgo y, en días como hoy, Juan Gaitán, que se une a la partida. Vamos:
café, zumo y frutas… ¿hay quien dé más?
Barbeito escribe -“Silencios”,
La tribu, ABC - de las preguntas sin respuestas: las muertes
de Alberto y Ascen - ETA, Sevilla, Enero y de noche… ¿se acuerdan?, sí, calle
de Don Remondo-, del Crimen de Marta, o de aquella tarde de fuego y verano en
Los Galindos… Son, amigo Antonio, los silencios que gritan dentro. Al llegar a
la garganta se ahoga; perdemos el resuello. Son silencios de preguntas sin
respuestas.
En “Cita con la historia”, José María Hidalgo habla de la
muerte de José Castillo, “el Patalete”. España
de luto y muerte; sueños imposibles, ríos que no cambiaron su curso. Tiempos de
represión y secuestros. Hombres terciados a lomo de bestias. Cerros y cuevas en
las calizas serranas: lluvias y vientos. Llamaba la muerte al alba. Maquis y
guerrilleros alargaban una guerra que demostraba el fracaso de la dos Españas…
Escribe Gaitán, “Niños
pobres” (La Opinión de Málaga). La puñetera realidad. Denuncia valiente.
Recuerdos de mañanas de invierno: fríos en los pies y rebecas de lanilla. Las
hacían las abuelas, las madres…Tardes de sol, sillas de aneas en las recachas
de las puertas. Pedro Pablo Ayuso y Matilde Conesa en las novelas de Guillermo
Sautier Casaseca, Cadena Ser. Sonaba lejana la radio…
No quiero desanimarte
– ni desanimarme- amigo Juan, Sevilla y Madrid están casi en el mismo ‘barrio’
que Bruselas, o sea, muy lejos. Tanto que, a veces, se olvidan de aquellos
niños que se hicieron grandes…