7 de febrero 2023. Comenzaron en 1976. Como quien dice, ayer tarde, pero no mucho más. Un grupo de gente joven con la ilusión que empuja a quien comienza y con la calidad de quien sabe qué quiere y a dónde quieren llegar. Pusieron el listón alto, muy alto.
Dicen que fue cosa de Instituto y de ilusiones de jóvenes… El grupo arrancó de la mano del líder. (¿Por cierto, era uno o eran dos? ¿Acaso todos tenían algo que necesitan sacar fuera todavía? Eran Tomás Salas y Pepe Márquez. Además Mariché García López (voz y percusión), Delia Trujillo Cordero (voz y percusión), Pedro Cordero Yánez (voz, guitarra y laúd), Juan Cristóbal Trujillo Cordero (voz y percusión), Juan Eugenio García López (voz y percusión), Pedro Cordero Yánez (guitarra)… Luego algunos más esporádicamente han estado, en momentos puntales.
Todo arrancó con folclore el tradicional de Álora. Decía Pepe Rosa que según el profesor García Matos Álora y Alosno tenían el folclore más rico de Andalucía… Su fuente de investigación ha estado centrada en la voz popular, conservando siempre el estilo, letras y música tal como han sido transmitidos. Y así se fue andando el camino. Me viene a la mente la labor de Tomás López con Encinasola. ¿Un encuentro? ¡Ojú, Dios mío si eso fuese posible!
Participaron en el Certamen Nacional de Música Folk de Tarifa. Consiguieron el primer premio en su quinta edición y en el que se celebró en 1985. Han participado también, en el Festival de Nacional del Almansa (Albacete) representando a Andalucía y en la III Muestra Folk de Jódar (Jaén). Han actuado en los medios de comunicación más sobresalientes de Andalucía y entre sus títulos más destacado figuran: “Fandangos de Álora”, los “Romance de Salvador, el Tejero” y “Álora, la bien cercada”, “El ermitaño” o “Malagueñas Tristes”.
Hace
unas noches, en el homenaje en el teatro que ya lleva su nombre, a Tomas Salas (¡qué pena que se nos fuese tan
pronto cuánto tanto tenía que decir) dejaron notas, pincelada, y ganas a los
que gustamos de estas cosas. Destellos de quien tuvo mucho y retuvo más. Ganas
de revivir lo que ya no es posible. ¿O si lo es? ¿Y si Tomás pidiese que en
recuerdo a él el Grupo volviese – con nuevos aires, por supuesto – a recoger otras
cosas del folclore que anda perdido por esos caminos… Me viene a la mente Joaquín
Díaz, el Nuevo Mester…y reincido, no perdáis de vista a Tomás López…
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