Baja el Camino de Santiago por un
valle entre montañas de cumbres redondeadas. Bosques frondosos de hayas y pinos
del Pirineo. Una nota de verdor al alcance de la vista. Fuentes de aguas
cantarinas mitigan la sed.
En Urdaniz se entra por la calle
de San Miguel. La carretera lo bordea. El pueblo queda a la derecha; el Arga,
el río de aguas claras, a la izquierda.
Urdaniz tiene una sólida iglesia parroquial de piedra de cantería y
campanas de toques agudos.
Un frontón a pie de calle. El
caserío derrama la esencia de las construcciones vascas, setos en los muros de
los jardines, abetos, geranios rojos en los balcones y tiestos a pie de calle,
tejados a dos aguas, cubrepuertas con tejas, dinteles con vigas macizas de
madera… A la salida del pueblo, de nuevo, en la carretera de Francia.
A Larrasoaña no se entra. O sí.
Si se cruza el puente de los Bandidos…
Merece la pena perderse. Tiene una historia rica en acontecimientos. Su
fundación se debe al monasterio de San Agustín, siglo X, que dependía de Leyre.
Restos del paso del tiempo: la parroquia de San Nicolás de Mira, la ermita y el
hospital de Santiago, entroncados a la Colegiata de Roncesvalles, la ermita y
el hospital de San Blas…
El puente de los Bandidos recuerda que en el siglo XIV era un lugar de
enorme peligro. En él se apostaban la gente sin escrúpulos esbozados y
atracaban a los peregrinos. Bajo sus arcos, entonces y ahora, corren las aguas
claras del Arga…
Robles, castaños, fresnos;
helechos, bulbos, rizomas; pastos, caballos, ovejas, vacas… Desde el siglo XII
se entra en Arre por un puente a tiro de vista de la ermita de la Trinidad.
Salva el río Ultzama que nace en el puerto de Velate y tributa al Arga, por la
derecha, en las cercanías de Villava. Se construyó siguiendo una vía romana. Su
arco central fue destruido a finales del XIX en la última Guerra Carlista.
Cercanos a Pamplona se palpa el
crecimiento de la ciudad. Polígonos industriales, fábricas, crecimiento de una
economía pujante. Pasada Burlada ya se está en la capital de Navarra. San
Fermín, el chupinazo, la Casa de Misericordia, la Clínica Universitaria,
Hemingway y Antonio Ordoñez…
No hay comentarios:
Publicar un comentario