Hace unos días el periódico dio
la noticia. En Madrid, con ochenta y ocho años – una chavalilla – había muerto
de neumonía Encarna Paso, hija de Antonio Paso y madre del actor Juan Calot.
Bueno, hasta aquí, puede ser una necrológica más, pero no es así. Por supuesto
que no.
Encarna Paso protagonizó junto
a Antonio Ferrandis la primera película española que obtuvo un Oscar, Volver a empezar. Una obra de José Luis
Garci.
Naturalmente, la película fue
mal acogida por ‘parte’ de la crítica que, después, cuando llegó el Oscar se
tuvo que envainar mucho de lo que había escrito contra la película y contra su
director. Pues eso. Normal. Reconocer los méritos de otros – y si no son de mi
cuerda - en esta España nuestra cuesta
mucho.
Antonio Miguel Albajara - Ferrandis- es profesor de Literatura en
Berkeley y vuelve, de incognito, después de obtener el Nobel de Literatura a su Asturias natal
para reencontrarse con su amor de juventud Helena – Encarna Paso - , roto por
mor de la maldita guerra. Garci viene a
decir que entre los mayores también se aman por encima del cariño y del afecto.
Es más, afirma “solo se envejece cuando no se ama”.
En el reparto, además, tienen
cabida dos excelentes actores, Agustín González, - el gerente Losada, del hotel
Asturias – y José Bódalo, - Antonio Roxu dirigente del Sporting de Gijón y
médico -, a quien Albajara confiesa que le quedan seis meses de vida.
Helela, o sea, Encarna Paso dio
vida a una mujer excepcional. Valiente, decidida, fuera de todo convencionalismo
y con su rol perfectamente definido en el ámbito social en que se
desenvuelve. Los paisajes asturianos, e
incluso, lo rodado dentro de El Molinón,
ponen una nota diferenciadora en toda la película…
Como actriz, en su vida
profesional, desarrollo una intensa labor en el teatro. Desempeñó papeles
clásicos. Tuvo un gran éxito con “Yo, Claudio”. Ahora que nos ha dejado ha
vuelto a saltar como noticia su gran aportación a la película del Oscar.
A mí la película, con la
lentitud propia que José Luis impone en toda su obra, me encantó. Claro que no
soy objetivo, yo tuve la suerte de conocerlo de la mano del Maestro Alcántara y
ante eso…
No hay comentarios:
Publicar un comentario