“Chupa y tira”, era casi patrón
(había muchas costureras y modistas) que cortaba la esencia del barrio. Una
definición que aclaraba la base de la economía culinaria, en una zona donde
sobraban bocas y faltaba el dinero. Había que hacer frente a las necesidades,
algunas tan perentorias, como esa costumbre de comer todos los días. En el
menú, almejas. Comida barata y al alcance de la mano, sobre todo de los pobres.
El barrio de la Victoria se
extendió hacia la ciudad desde el Santuario de la Patrona. Gibralfaro por el
este; por el norte, el Calvario; por poniente, “el lejío” (el Ejido); por el sur, la Plaza de la Merced. Allí, nació
Picasso. Ahora, con el derribo del cine Astoria, se presenta una ocasión de oro
para dotar de un espacio diáfano a una gran plaza. Tengo mis dudas, demasiados
intereses... Allí, arrancaba la calle de la Victoria, arteria de salida para
encarar la Cuesta de la Reina. Los días de Oficios en la Catedral, era un
bisbeo de becas rojas sobre los hombros de los seminaristas…
Barrio de gente sencilla y
trabajadora. En la calle del Agua, la capilla del Rescate y la Virgen de
Gracia. “La Virgen de Gracia era mi vecina de enfrente cuando yo era niño”, dejó
dicho el maestro Alcántara. Un poco más
allá, en calle Lagunillas, un lugar donde tuvo las primeras lecciones de boxeo
desde el otro lado de las cuatro cuerdas.
Frente a la iglesia de San Lázaro
– el primer lazareto de Málaga, fundado cuando casi terminaba el siglo XV - el
Jardín de los Monos. Una jaula de hierro tenía prisioneros dos monos escuálidos
a los que los niños, a veces… En fin, esas cosas que pasaban en otros tiempos.
El camarín de la Virgen de la
Victoria es una joya del rococó. El panteón de los condes de Buenavista, uno de
los más tétricos que uno puede encontrarse deambulando por España. La muerte da
miedo siempre, cuando se baja a la cripta, entonces, más. Conquista, milagros que propician victorias,
frailes Mínimos, convento que fue y ya no es, Fernando el Católico y
Maximiliano de Austria que regaló la imagen…, Patrona desde entonces.
Todo eso es parte de la historia
de Málaga y de España cuando aún no se llamaba así y por ende del barrio de ‘Chupitira’, o sea, del Barrio de la Victoria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario