Arrancaba agosto. Calor torrido. ¡Vaya novedad! Cruzamos
el Guadiana por Ayamonte. Luego, el Algarve. Subimos por el Baixo Alentejo.
Tierras de suaves colinas, olivos, algo de ganadería, pastos secos…
A media tarde ya hemos cruzado
parte del Alentejo, la tierra que está más allá del Tajo, o sea, la tierra al
sur del Tajo. La mayor concentración de alcornoques de Portugal - es el primer productor del mundo de corcho
- . Venden melones amarillos a pie de carretera. Estamos perdidos. En un cruce
preguntamos. Comemos - ¡qué bien se come
en Portugal! – en una venta de carretera. El calor hace que aparezcan algunos
nervios.
Llegamos. El alojamiento está
concertado en las Minas de Lousal. Ya no hay minas. Los antiguos edificios han
pasado a ser un complejo hotelero. Casas blancas, tejados altos. La pirita se
toca con la mano. Las minas permanecieron abiertas desde primeros del siglo XX
hasta casi su final…
Visitamos las galerías. Aprieta
el calor. Nos permiten ir con los coches hasta las bocas de entrada. Nos guían.
Nos explican. Nos dicen el porqué de su cierre. Todo es economía que no resiste
el paso de otras tecnologías. Empuja la modernidad.
Cae la tarde nos vamos a Grândola.
Aquí, bueno, aquí no, sino que una
canción dedicada por Ze Alfonos a la banda de música local, “Grândola, Vila
morena”, desde Radio Renaçenza dijo que había comenzado la Revolución de los
Claveles. Pateamos la ciudad. Nos sentamos a la sombra. Se agradece el frescor
del parque…
Regresamos al coche, una
rueda rajada. Pasa un señor. Se interesa
por la situación. Nos dice que volverá con un mecánico. Desconfío. Al rato – se
hace eterna la espera por la proximidad de la noche – vuelve con él. No hay posibilidad de arreglo en el lugar.
Hay que ir al taller. El hombre me repone
el neumático rajado. Le digo que me cambie, también, el otro. “No, me
dice, está bien, cuando sea necesario lo hace usted en España…” Me cobra lo
justo. El señor que fue el buen samaritano y me solucionó el problema no acepta
ni una propina, ni un café…
-
“Aquella casa de la esquina es mi casa, si
ustedes necesitan algo…
“Grândola, Vila Morena, terra
da fraternidade…” Hace día que pasó el 25 de abril. Recuerdo entrañable para
gente entrañable de un pueblo entrañable…
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