La vida viene una mañana y dice
que Alberto Cortez suspende una gira que iniciaba por América, y que está
ingresado, de urgencias, en un hospital de Móstoles… La vida viene un par de
días después y te dice que Alberto se ha ido…
La vida te dice que hay orillas
a un lado y a otro y que hay quien no tiene fantasías y que no saben lo que es
recibir una rosa desde lejos. Y que el calendario se deshoja cada día y que cada
hoja tiene un nombre propio que echó raíces dentro de cada uno de nosotros.
La vida dice que hay caminos
que llevan lejos y que acortan las distancias y que no somos ni de aquí ni de
allí. Somos de todas partes y que, además, la edad es algo tan aleatorio como destellos que se desgranan de las estrellas
lejanas en las noches de verano.
La vida dice que ahora mientras
escribo estas líneas los aeropuertos están llenos de gentes, que los cielos
tienen abiertos surcos que dejan esas naves de acero que aunque parezca mentira
vuelan, y en un rincón del alma anida la
pena que nos dejó el adiós, ese adiós al que nos asimos porque no queremos que
la realidad se imponga a los sueños y a los poemas que nunca salieron y a los
fracasos que… ya se sabe.
Echo mano de tus canciones,
Alberto. Tú nunca sabrás – o lo mejor lo sabes ya todo – cuanto has aportado a
aquella juventud, porque un día fuimos jóvenes y hasta creíamos que muchas
cosas tenían arreglo y que las palmeras esos árboles raros que vinieron de los
desiertos de arenas pero que siempre apuntan al cielo y que se bambolean cuando
arrecian los vientos, siguen ahí…
Ya ves. Se visten de rosas
nuevas los rosales de los arriates: rojos, rojos intensos - perlas negras – amarillos, pespunteados de
ámbar, pespunteados de blanco, pespunteados de amor, ese amor que hace que a
uno se broten lagrimas del alma porque un amigo se va….y, a pesar de todo
sigamos haciendo castillos en el aire.
La rosa de hoy es para ti,
amigo, tienen que ser para ti. No hay otra manera de agradecerte tanto y tanto
y uno, en su ilusión sigue pensando en aquello de beatle: “la vida es eso que pasa
mientras estamos haciendo planes”.
Precioso como todo lo que escribes amigo José, me encantaba Alberto cortés unas cuantas veces tuve la suerte de ir a ver sus conciertos, una fue en San Juan Alicante por los años 1972 cantaba esas románticas canciones que eran muchas y preciosas,gracias por recordarnos estas cosas tan bonitas de nuestra juventud, y bienvenido seas de nuevo !! Un fuerte abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, amiga.
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