lunes, 20 de junio de 2022

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Cuando calienta el sol..


                          

  

            Festividad del Corpus Christi. Benalmádena (Málaga)


20 de junio, lunes. Dicho así, es el recuerdo de una canción de los principios de los años sesenta del siglo pasado… También puede ser un avivar la memoria, por si a alguien se le había olvidado, que entramos en los meses, donde en el hemisferio norte calienta más el sol. De un tiempo a esta parte, el ‘verano’ se alarga tanto por los dos extremos, que pisa terreno de la primavera y del otoño. Vamos, avaricia sin más.

Calentaba el sol de una manera aplastante. Los segadores – en Castilla las cuadrillas venían de Galicia – se arrancaban con las primeras luces del alba y aquello duraba hasta que el sol hincaba la cresta por el otro lado de las lomas. El folclore lo reflejó y cantó aquello de “segar de los secanos / ya vienen los segadores / de beber agua de pozo / todo llena de gusanos”.

Vinieron las máquinas de la mano del progreso. Se convirtió en otra cosa. Un tractor, una cabina cerrada hermética, aire acondicionado, y música para pasar las horas. Un hombre bajaba del tractor para dar paso a otro que, después de repostar, seguía decapitando espigas. Un camión recogía el grano casi al mismo tiempo…

La era se quedó sin moreros. No había que esperar, bajo el sombrajo de cañas, en horas de calma chicha a la marea para aventar, después de que la cobra de yeguas – en otros lugares, más modestos, la cosa iba de mulas – hubiese trillado la parva extendida en la espera para separar el grano de la paja…

Ahora, durante estos días, ha calentado el sol. Demasiado, tanto que, en algunos lugares, se han originado tormentas secas. Los rayos caídos han asolado muchas partes de España. Incendios pavorosos. La mano del hombre, también ha tenido que ver en otros sitios. En fin. Esas cosas que pasan cuando la gente dice “es que yo creía…” pero hombre, si tú crees en Dios y te cuesta trabajo…

Ha calentado el sol, - a veces, demasiado – en la campaña electoral que acabamos de soportar. Menos mal, que al menos en esta ocasión, nos hemos librado de esos coches con megafonía pasada de decibelios donde nos decían qué teníamos que votar…

Cuando calienta el sol, en algunos lugares - benditos lugares que no han perdido sus tradiciones -  han engalanado sus calles y balcones y han celebrado el Corpus…

 

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