jueves, 12 de septiembre de 2013

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Luz y biznagas

Por Moreno Monroy, -sí, esa calle estrecha, conforme se baja al mar, a mano izquierda-  se asoma, la catedral, a calle Larios. Se viste la torre con mantilla de sol que anuncia otoño y, desde la estatua del Marqués, ese señor tan reverente que se quita el sombrero ante tanta gente como pasa, viene un brisa ábrega y salada.

Pasa un biznaguero, luego otro; después, dos más. Las pencas van ahítas de ramos y, en las puntas, piropos blancos. Los jazmines son azahares tardíos que se quedaron por aquí para pasar el verano. Por el aire flota eso que sólo dejan  las biznagas cuando pasan los biznagueros.

Tocan las campanas de la catedral. ¿Llaman a Angelus? ¿ A misa de canónigo vespertino? Maestro Barbeito, me acuerdo de ti cuando dices que suenan a bronce las palabras. Pero, éstas no tocan a amor primero como aquellas de tu calle cuando eras un muchacho travieso.

Bulle la gente. La calle es un hormiguero. Charlan, pasean, hablan… Llenan los bancos de mármol que orillan lo que antes fueron aceras. Reclaman atención del que pasa los escaparates y el saltimbanqui  y los hombres de mímica que aguantan  y aguatan. Y uno que vende globos de colores y el músico que toca - aporrea- no sé qué instrumentos. Gente y  más gente.

Vivíamos la ilusión colectiva. ¿Se acuerdan? Aquello de ahora, sí. ¿Usted quiere  -le preguntaron a uno-que le den los Juegos a Madrid? Pues claro, respondió- ¿no voy a querer si la calle de Alcalá es la prolongación de la calle Larios…? Y ni se mudó de color, ni ná.


Entra la luz por las bocacalles. Es la luz de la tarde. La luz que anuncia otoño. Es la luz del sur. La sagrada luz del sur de la que hablaba Miguel Ángel Asturias. Esa luz que se sube a los mástiles de los barcos en el puerto, a las torres de los palacetes, a las espadañas de de las ermitas o como esta tarde, a la torre de la catedral que se une, y se asoma a la calle Larios.

4 comentarios:

  1. Bulle la gente. La calle es un hormiguero. y así un día y otro día, Tanto en verano como en el otoño que ya viene entrando con esa luz que lo anuncia. Muchas personas caminan por otras calles, Larios, la del Castillo en Tenerife, y la vida sigue y tu nos recuerdas cada rincón, cada rayo de luz y un fuerte olor a jazmines de esta tierra del sur.
    Gracias amigo en esta noche me ha servido para irme a la cama con la paz que transmites en tu escrito

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  2. Nos transporta a la c/ Larios en segundos, oímos lo que nos dice como si a tú lado fuésemos, y cuando oímos que la calle Alcala es la prolongación de la calle Larios, los ojos se nos abren, por el orgullo de tener ese pedazo de vía que nos llena y nos penetra en esa Málaga de nuestros sueños.

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  3. Un poquito más sobre Málaga:
    http://www.jotdown.es/2013/06/malaga-un-plan-chestertonianamente-sencillo/

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  4. Algo debe tener la luz de Andalucia Pepe, cuando pintores como Sorolla- que no estaba falto de luz precisamente -se sintiese fascinado por ella. Pero dentro de Andalucía la luz de Málaga es especial, yo creo que su secreto para nosotros, los que la percibimos especial, es que es nuestra luz...

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