domingo, 16 de junio de 2019

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Torija, donde dicen que comienza la Alcarria




Cela salió de Madrid en un tren tempranero. Emprendía un viaje por la Alcarria. Madrid se despertaba, cuenta, con gatos cimarrones que hurgaban en los cubos de la basura, gente que iba y venía, carros ruidosos por las calles…

Cela, que tenía mal humor, soportó las preguntas que la gente le hacía y se interesaba por si iba a Zaragoza. Cela comenzó el Viaje a la Alcarria en Torija que es donde dicen que de verdad comienza la región de la miel y la tierra dura de Guadalajara.

Este viajero que iba en compañía de otros viajeros llegó a Torija cuando había pasado ya el mediodía. En principio iba para Hita pero en Tórtas de Henares donde no encontró donde comer dio sobre sus pasos y se llegó hasta Torija.

No había mujeres en el lavadero, ni carros para transitar los caminos ni…  Los trigos para la siega; corcojas, en la llanura. Comió en un mesón excelente. Tenían de todo y bueno. En la puerta un letrero anunciaba: Asador Pocholo. Cuando a uno le dan bien de comer, le cobran lo que es preciso y le tratan con corrección, lo reconoce públicamente por si a otros viajeros puede servirle.

De Torija le llamó la atención la limpieza, la pulcritud del pueblo, el frío que hacía y cómo sobresalía en un cielo con cirros estirados – lo que hablaba de la temperatura en las altas capas de la atmósfera – la torre del homenaje del castillo.

Se documenta y sabe que desde mucho tiempo atrás el hombre pobló este valle y que, luego, los Mendoza lo  levantaron y que por mor de las guerras y esas cosas en el castillo de Torija se hicieron fuerte los navarros que habían venido a Castilla a luchar contra Juan II que a su vez era primo del rey de ellos, Juan II de Navarra. Aquí tuvieron acogida, parada y fonda, Carlos V, Felipe II, Juan Martín “el Empecinado’, Enrique Líster o Hans Kahle, jefes de la brigadas cuando lo de la batalla de Guadalajara…

El viajero emprendió viaje. El sol declinaba sobre la Alcarria. Por la N-II, que es autovía, los coches iban raudos, veloces. Cortaban el viento. Vio al otro lado de la carretera el Hostal ‘La Liébana’ donde pernoctó una noche de hace muchos años…



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