jueves, 9 de mayo de 2019

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. Veda abierta




Parece que hay un todo revuelto que como el aire de primavera la gente lo siente pero nadie sabe de dónde sopla. Esta mañana discutían dos amigos. La controversia era por si la veleta de la Vera Cruz apuntaba a norte-norte, o era noroeste. “To es pa ná, dijo uno que se arrimó a la discusión, mientras no apunte al tejado de La Balita…”.

Sevilla está de feria. Vamos, eso dicen. Las imágenes muestran lo de todos los años: gente sana que se divierte, que va a los suyo, gasta y que se pone, por unos días, el mundo por montera. Pulula, también, la masa de gorrones que busca donde abrevar.  Hay otros, los tiesos de traje del Corte Inglés, para pagarlo con la tarjeta, el último día del mes siguiente o a plazos, y un catavino en la mano. Están en la puerta. Tienen que ser vistos, si no los ven… Los resultados económicos dan cifras mareantes.

La prensa de esta mañana viene con una polémica de órdago. Por lo que cuentan no quieren al presidente ‘in pectore’ que puede presidir el Senado. Valga la redundancia, ¿si un presidente, no preside?... Ya, ya  sé lo que puede estar pensando, pero no va por ahí el agua al molino. Le han dicho de todo, menos bonito. Muy pocos le han reconocido su inteligencia natural. Lleva toda la vida viviendo de la política… Es listísimo. La duda ofende.

En el Instituto donde trabaja mi hija, al llegar ayer, un alumno le prguntó:

-         Maestra, ¿viste el partido de Liverpool?

-         No, solo el cuarto gol…

-         “Pues ya viste más que los jugadores del Barcelona”.

También les han abierto la veda a estos muchachos por el dichoso despiste. Alguien dijo que de fútbol no sabe nadie. Es una gran verdad. Otra cosa es el cuento que se mueve en torno a todo ese mundo con jugadores que ‘se borran’, con otros que están pensando en no se sabe qué o dónde. Bueno, a lo mejor en el buenismo que nos ponemos cada mañana, al salir de la ducha, hasta le concedemos la facultad de ejercitar eso que se llama pensamiento.



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