domingo, 3 de noviembre de 2013

Una hoja suelta del cuaderno de bitácora. El Pueblo

                                              

Está donde siempre. A sol naciente, frente a los Lagares y, a poniente, en las faldas de El Hacho; abajo el río. El río se escabulle entre las huertas. Este año parece que aguantan - las huertas -  más el verde que otros o será porque las lomas están huérfanas de otoñada y pardean más de lo que deben hacerlo por estos días.

Se va el río camino de la mar. Se siente cercana. Casi al alcance de la mano, pero no se ve. Hay más sol porque amanece antes; las tardes son como pensar un rato, despacio. Como decía la madre de una amiga mía: “aún hay sol en el peral”. El sol dorado –porque no hay un sol mas dorado como el que se va, en otoño, por monte Redondo-  tiene la Gracia de Dios.

Dice mi amigo Antonio Javier Trujillo, siguiendo el consejo de otro amigo, “que siempre hay que volver al pueblo”. Y ha vuelto pero no nos hemos visto. Será por culpa del tiempo… será porque me fui al campo. Sabía, por su madre, que venía pero no nos hemos visto.

Ha vuelto, también, por estos días,  mucha más gente al pueblo. Otra gente. Vienen a lo que vienen y, algunos, de paso, a echar un rato, corto porque siempre traen bulla, con los recuerdos.  Por cierto, a quien tengo muchas ganas de ver, porque haya vuelto, es a Manonillo, “el Albulaguero”… Las ha pasado negras, negras, negras…

Hay que volver al pueblo. Calles largas; casas blancas y el cielo casi siempre azul. Si la veleta de la Veracruz apunta a sol naciente, sopla Levante, nubes mañaneras: abren al medio día; si hacia la Cancula, cielo limpio y día claro; si es al tejado de La Balita, (casi nunca) agua segura. Anuncia que vienen vientos atlánticos…


El pueblo siempre recibe al que viene. Espera y no tiene prisas. Está donde siempre. Si le hacemos caso a Juan Ramón se hace nuevo cada año y, ofrece sus casas blancas, su cielo con palomas que vuelan, con gorriones en los árboles del parque, con niños que juegan, con campanas que tocan en el campanario…

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